En la primera visita se realiza una historia clínica completa, y una exploración física donde se valora la morfología del paciente (general, y en particular de las zonas que se desean tratar), así como aspectos concretos como el volumen de grasa localizada, asimetrías, calidad de la piel, presencia de estrías, etc.
La visita se completa con una serie de mediciones y fotografías estandarizadas.
Antes de la intervención se realizan unas pruebas preoperatorias generales (analítica general, electrocardiograma y radiografía de tórax).
El tipo de anestesia, la duración de la intervención y la necesidad o no de ingreso hospitalario variarán en función del volumen y el número de zonas a tratar.
Se realizan incisiones de 4mm de longitud para la introducción de las cánulas. Estas incisiones se sitúan siempre en zonas donde sean fáciles de ocultar, y los bordes se protegen durante todo el procedimiento.
En cada una de las zonas a tratar se infiltra una solución de suero, anestesia local y adrenalina, que reduce el riesgo de sangrado durante y después de la intervención.
Tras esperar que la solución haga efecto, se inicia el procedimiento de aspiración mediante la introducción de cánulas romas con diferentes puntas de aspiración y de diferentes diámetros según las zonas a tratar. Las cánulas están conectadas a un sistema de aspiración que va evacuando la grasa, llevándola a unos receptáculos desde donde el cirujano puede contabilizar los volúmenes aspirados en cada zona. Es muy importante realizar una aspiración uniforme y mediante trayectos cruzados para evitar irregularidades y asimetrías.
El paciente es dado de alta con una prenda de compresión que deberá llevar durante un mes.
Las recomendaciones específicas al alta son realizar reposo relativo y evitar los pliegues en la prenda de compresión.
El efecto definitivo de la intervención será visible a partir de los 3 meses del postoperatorio. Antes se puede observar inflamación abundante y hematomas superficiales que pueden permanecer hasta 4 semanas. El dolor se controla bien con una pauta analgésica y antiinflamatoria.
Los puntos se retiran en Consulta a los 7-10 días. En general, las pacientes pueden reincorporarse al trabajo a los 4-7 días, en función del número de zonas tratadas.